Es importante limpiar su silla de ruedas cada vez que visite un lugar público, como un supermercado. Todas las superficies de contacto deben tratarse con una solución desinfectante. Desinfecte con toallitas que contengan al menos un 70 % de alcohol u otras soluciones desinfectantes de venta libre aprobadas. El desinfectante debe permanecer en la superficie durante al menos 15 minutos. A continuación, limpie la superficie con una toallita y enjuáguela con un paño estéril. Asegúrese de enjuagar todas las superficies con agua limpia y secarlas completamente después de la desinfección. Recuerde que si su silla de ruedas no se seca correctamente, puede dañarse. Siempre es mejor limpiar cualquier componente de su silla con un paño ligeramente húmedo, no mojado.
¡No utilice disolventes, lejía, abrasivos, detergentes sintéticos, esmaltes de cera ni aerosoles!
Para obtener más información sobre cómo limpiar los controles de su silla de ruedas, consulte el manual de instrucciones. No olvide desinfectar los reposabrazos, las asas y otros componentes que los usuarios y cuidadores tocan con frecuencia.
Las ruedas de su silla de ruedas están en contacto directo con el suelo y, por lo tanto, con todo tipo de gérmenes. Aunque no se realice una desinfección diaria, se recomienda limpiarla cada vez que regrese a casa. Asegúrese de que el desinfectante sea seguro para su silla de ruedas antes de aplicarlo. También puede usar agua jabonosa y secar bien el asiento. Nunca lave su silla de ruedas eléctrica con una manguera ni la ponga en contacto directo con el agua.
Las empuñaduras son una de las principales fuentes de infección en una silla de ruedas, ya que suelen estar en contacto con muchas manos, facilitando así la transmisión del virus. Por este motivo, es necesario limpiarlas con un desinfectante.
El reposabrazos también es un componente de contacto frecuente que debe desinfectarse. Si es posible, se pueden usar desinfectantes de superficies para limpiarlo.
Tanto el cojín del asiento como el del respaldo están en contacto directo con nuestro cuerpo. El roce y la transpiración pueden contribuir a la acumulación y propagación de bacterias. Si es posible, desinféctelo con un desinfectante, déjelo actuar durante unos 15 minutos y séquelo con papel o paño desechable.
Fecha de publicación: 15 de septiembre de 2022
